Y de pronto llega el frío, el otoño, y a la vuelta, el invierno. Llega el frío y las tardes en un portal. Las bocanadas de aire. Las noches bajo edredones. Los dormir abrazados a un peluche. Los abrigos de plumas. Los guantes y bufandas. Llega el frío y los besos en busca de calor. Los abrazos tiernos. Los dos bajo el paraguas.
Llega el frío, el otoño, y a la vuelta, el invierno. Y yo en mi sofá, con mi manta de leopardo y un buen café.
Para la gente envidiosa. Para quién mira por encima del hombro. Para quién no ve más allá de su ombligo. Para quién habla más de la cuenta. Para quién miente más que habla. Para quién aparta la mirada al verte. Para quién va de amigo a la cara y a la espalda de enemigo. Para quién sonríe con asco. Para quién critica. Para quién dice "no lo lograrás". Para quién cuestiona. Para quién critica antes de mirarse. Para quién valora más el exterior que el interior. Para quién no lucha por los que quiere. Para quién no valora a los que tiene. Para quién no hace locuras...
Lo quieres, lo amas, es él, el perfecto, y es que te derrites sólo de verlo, y es que sonríes sólo de pensarlo y cada movimiento que hace tu cuerpo va dedicado a él, cada palabra susurrada, a él, cada noche en vela, por él...